“Una
 de las cosas más tristes es que lo único que un hombre puede hacer 
durante ocho horas, día tras día, es trabajar. No se puede comer ocho 
horas, ni beber ocho horas diarias, ni hacer el amor ocho horas... lo 
único que se puede hacer durante ocho horas es trabajar. Y esa es la 
razón de que el hombre se haga tan desdichado e infeliz a sí mismo y a 
todos los demás.”